-El acto litúrgico que apertura la Feria Chiquinquireña se convierte, una vez más, en el puente de fe para la sanación del alma maracaibera y la recuperación de su Lago.
Por: Joaquín Chaparro Oliveros /
-Este sábado 25 de octubre, el corazón de Maracaibo se detiene y se eleva. Nuestra amada Virgen María Rosario de Chiquinquirá realiza su tradicional y solemne "Bajada", el emotivo acto litúrgico que apertura nuestra Feria Chiquinquireña y marca el inicio de un mes de intensa fe y devoción.
-Este reencuentro de la Madre con su pueblo, que es siempre una inyección de esperanza, me invita a plasmar esta reflexión en verso, un clamor que nace desde el pecho maracaibero y que he titulado: "Canto de Vida y Sol".
-En él se entrelazan la identidad zuliana, el fervor mariano y la certeza inquebrantable de que, con la fe puesta en La Chinita, el milagro para nuestra tierra es posible, comenzando por el rescate de nuestro Lago.
● Canto de Vida y Sol:
¡Maracaibero soy, del calor y la canción!
Donde se aproxima la bajada de La Chinita y su esplendorosa Procesión.
Tu verso vive en mí, latido del corazón,
Casa grande de tu hermoso resplandor.
La quiero ver bonita de nuevo, sin sombra o pesar;
Que tu gente, tu luz, regresen a brillar.
¡Que viva el Lago! Fuente de nuestro ser y de su gente;
Vida es el comienzo, por siempre y eternamente.
Vida de ensueño y versos. Que buchones y toninas surquearon sin parar,
Lo queremos luminoso, ¡ayudémoslo a levantar!
El Lago es vida, no hay pena, solo porvenir;
El alma del zuliano por su agua ha de fluir.
Mas renacerá, lo sé, hay fe en el horizonte;
La China y Papá Dios cruzarán ese puente.
Cristal, magia de sabiduría ancestral.
De la mano del pueblo, del maracaibero fiel,
Harán el milagro, con sabor a guarapo e' papelón y a miel.
Espejo de cristal, que vuelvan tus colores,
Tus marullos de espumas laven los dolores.
Que la magia grandiosa nos despierte al fin,
En esta tierra amada, donde el sol es querubín.
Y para el gran cierre, con la fuerza de Don Pedro Colina:
Cuando escucho el chapoteo del marullo y su rumor,
Se me infla el pecho de orgulloso y de valor.
¡Al saberme Maracucho, el alma dice "¡Aquí estoy!"!
Con la fe del buen zuliano, que es hoy, mañana y voy.
¡Vos sabéis que Maracaibero soy!
La Fe, Puente para el Porvenir
El clamor por nuestro Lago, expresado en estos versos, no es una súplica vacía, sino el compromiso de un pueblo que sabe que la acción y la esperanza deben ir de la mano.
-La Bajada de La Chinita es el símbolo de que ella desciende para encontrarnos, para ser ese cristal y esa magia que nos despierte. Con la fuerza de la fe y el compromiso cívico que nos une, los maracaiberos cruzaremos ese puente de esperanza para que el Zulia y su amado Lago renazcan para siempre.
DC/ Abogado Joaquín Chaparro Oliveros / Demócrata Cristiano.&
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