Republica del Zulia

Julio Portillo: Necesitamos entonces promover el regionalismo como protesta al excesivo centralismo en todos los órdenes. Tenemos que despertar la conciencia política de la provincia.

sábado, 11 de octubre de 2025

Neuro Villalobos: El estado del desespero



Las revoluciones terribles no solamente pretenden justificarse mediante la razón, sino fundarse en la ilusión de un precedente remoto, difícil de distinguir de la utopía. Angel B. Viso..

Con el título de este artículo catalogaba Hanna Arendt el pensamiento de Maquiavelo en el sentido de que éste concibió el proyecto de ejecutar la fundación de un Estado cuando el tiempo categorial de la fundación era el tiempo de lo ya cumplido. Veintiseis años después de una asonada militarista fracasada en medio del ruido de unos tanques y del miedo propio de soldados engañados y comandantes cobardes, debe ser motivo para la reflexión y no para la celebración de un grupito  que gustan llamarse  o autocalificarse de “revolucionarios”, sin que hayan mostrado la m[as m[inima capacidad de sacrificio en aras de la libertad y del humanismo creador.

Querer glorificar la fecha del 4 de febrero de 1992 como como el día de una fecha histórica por su heroicidad sólo cabe en la mente fantasiosa de unos pocos revoltosos a quienes gusta llamarse revolucionarios. Fanáticos de la “Hugolatria” que aspiran a hacer un reconocimiento inmerecido, propiciado y auspiciado por lamebotas de oficio y estimulado por un ego desmedido.

Es conveniente recordar a Octavio Paz que ya en a;o 1982 hablaba de la “vieja acepción” del vocablo “revolución como la primacía del pasado y del tiempo cíclico, para concluir melancólico con ocasión de recibir el premio Tocqueville en Francia en 1989, que “la revolución comienza como promesa, se disipa en agitaciones frenéticas y se congela en dictaduras sangrientas que son la negación del impulso que la encendi[o al nacer.”

En tiempos de reflexión sería conveniente releer a Carlos Marx con sentido analítico y así podemos encontrar la crítica que dice Enrique Krauze parece haber sido escrita en la Venezuela que vivió Hugo Chávez: “La revolución social del siglo XIX, no puede sacar su poesía del pasado, sino solamente del porvenir. . . la revolución del siglo XIX debe dejar que los muertos entierren a sus muertos, para cobrar conciencia de su propio contenido.”

Los acontecimientos que en forma sucesiva vienen ocurriendo en el país mantienen en sobresalto permanente y en incertidumbre total al ciudadano venezolano. Solo la obsesiva actitud del régimen por imponer una forma de gobierno contrario a nuestra idiosincrasia, a nuestra cultura, a nuestros principios y valores, impide prever las consecuencias de sus decisiones improvisadas, circunstanciales, inconsultas, y con fines meramente políticos.

Es motivo de alarma extrema el acelerado proceso de destrucción moral y  material de la República de Venezuela y más alarmante aún es la sordera y el desdén de quienes gobiernan y de sus altos funcionarios que se niegan a oír el clamor de su pueblo. Las consecuencias de un conjunto de leyes elaboradas y aprobadas en la obscuridad de las complacientes paredes de la Asamblea Nacional anticipaban la pérdida en la calidad de vida de todos los venezolanos, con excepción, claro está, de los que disfrutan de manera mal habida el Tesoro Nacional.

El racionamiento de la energía eléctrica, el gas y el agua, servicios esenciales para la vida de los ciudadanos y el funcionamiento de las instituciones, deteriora aún más las precarias condiciones que viene padeciendo un elevado porcentaje de la población que vive prácticamente en la indigencia.

Parece que hemos vuelto a lo que hace ya más de treinta años, José Ignacio Cabrujas, ese venezolano excepcional denominó al Estado Venezolano como el “Estado del disimulo”. Se refería entonces al sentido de provisionalidad, del mientras tanto y del por si acaso propio del campamento-Hotel que en varias de sus obras caricaturizó lo que hoy tenemos como país, aunque yo lo llamaría el Estado del desespero sin mayor esfuerzo mental porque ya todos sabemos lo que eso significa.

nevillarin@gmail.com

https://www.costadelsolfm.org/

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