En un emotivo acto celebrado este sábado 18 de octubre en el Centro Cultural Chacao, la Cruz Roja Venezolana y el Comité Internacional de la Cruz Roja entregó a la destacada enfermera María Teresa Párima, quien recibió la Medalla Florence Nightingale, la más alta distinción internacional que otorga el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) a profesionales de enfermería por su entrega, liderazgo y servicio ejemplar en contextos humanitarios.
A sus 94 años, Párima continúa ejerciendo como directora del Departamento de Enfermería del Hospital Carlos J. Bello de la Cruz Roja Venezolana, después de 74 años de servicio ininterrumpido dedicados al cuidado de los más vulnerables. Su trayectoria, marcada por la vocación, la ética y la compasión, ha inspirado y formado a generaciones de enfermeros y voluntarios.
Durante la ceremonia, el Presidente de la Cruz Roja Venezolana, Dr. Luis Farías, destacó: “Maria Teresa, tu nombre está inscrito para siempre en la historia de nuestra institución. Has sido testigo y protagonista de las más difíciles circunstancias que ha enfrentado nuestro país; has acompañado a miles de personas en hospitales, en comunidades apartadas, en emergencias y desastres. Tu trayectoria está profundamente ligada al Hospital Carlos J. Bello de la Cruz Roja Venezolana, donde han nacido miles de venezolanos bajo tu asistencia, bajo tu mirada atenta y tu cuidado lleno de humanidad.”
Por su parte, Valérie Aubert, Jefa del Comité Internacional de la Cruz Roja en Venezuela, también expresó palabras de reconocimiento: “Maria Teresa Parima ha encarado los valores más profundos de nuestra misión: servir con compasión, cuidar con dignidad y actuar con coraje, incluso en los momentos más difíciles. Gracias, señora Maria Teresa, por su ejemplo.”
La Medalla Florence Nightingale, otorgada en Ginebra por el Comité Internacional de la Cruz Roja, fue instituida en 1912 en honor a la pionera de la enfermería moderna, se otorga cada dos años a profesionales que hayan demostrado una dedicación excepcional en situaciones de conflicto, desastre o crisis humanitaria, así como un compromiso sobresaliente con la formación y la ética del cuidado.
María Teresa Párima, nacida el 21 de septiembre de 1930 en el estado Anzoátegui, inició su formación en la Escuela Municipal de Enfermería gracias a una beca, graduándose en 1951. Desde entonces, ha sido pilar fundamental en la Cruz Roja Venezolana, tanto en la atención directa como en la docencia. Su incansable labor durante el deslave de Vargas, el terremoto de Caracas y la pandemia de COVID-19 la han convertido en un referente de vocación y liderazgo humanitario.
“Esta medalla no me pertenece únicamente. Es un reconocimiento que comparto con cada enfermera y enfermero de la Cruz Roja Venezolana, con cada voluntario, con quienes han trabajado a mi lado y con quienes me inspiraron desde mis primeros pasos en esta hermosa labor. Mientras tenga fuerzas y mi mente se mantenga clara, seguiré aquí, al servicio de la Cruz Roja y de mi país.”, expresó la galardonada.
El acto concluyó con un prolongado aplauso de pie, símbolo del respeto y la admiración de los presentes, acompañados por la Orquesta Sinfónica Ayacucho, que dirige la maestra Elisa Vegas.
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