Rodrigo Cabezas, economista, docente universitario y exministro de Finanzas, advirtió este martes que en corto plazo no es posible un crecimiento económico sostenido en Venezuela que esté vinculado al progreso, bienestar y salarios justos si no se aumenta la inversión y el consumo.
Durante una entrevista este martes en el programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias, el economista resaltó que el principal requisito para una política económica efectiva es la estabilidad política y social, que permita que las dos grandes variables de crecimiento consumo e inversión se comporten de forma positiva.
“El contexto no permite que podamos recuperar la inversión a los niveles de un crecimiento sostenido, sustentable y permanente”, aseguró.
Brecha cambiaria
Cabezas hizo énfasis en que la política económica es responsabilidad del Estado y no de los comerciantes ni de los consumidores.
Afirmó que la brecha cambiaria continuará en el tiempo, en gran parte debido a la incertidumbre política y económica que vive el país tras las elecciones presidenciales del 28 de julio y a que en los últimos cuatro años la liquidez monetaria aumentó de manera desmesurada.
“Por un lado, intentan controlar la brecha cambiaria con intervenciones del Banco Central de Venezuela (BCV) vendiendo dólares al mercado para que no haya insuficiencia frente a la demanda de divisas de la economía y, por otra parte, producen dinero a borbollones”, explicó.
Según él, de enero hasta ahora, la liquidez en Venezuela se incrementó un 120 %, lo que equivale a la creación de cerca de 80 billones de bolívares, cantidad que presiona inevitablemente el tipo de cambio.
Añadió que estos recursos debieron provenir de sectores como la agricultura, agroindustria, comercio e importaciones, en lugar de ser el resultado de decisiones administrativas y burocráticas del Ejecutivo.
“Durante la campaña electoral la liquidez creció en dos meses más de 20 %, lo que habla claramente de un desborde fiscal del gobierno”, agregó.
Reservas internacionales “quemadas”
El exministro cuestionó la ausencia de un debate autónomo en el Parlamento sobre la política económica y el uso de las reservas internacionales del país.
“Si aquí hubiese un Parlamento verdaderamente autónomo, habría un debate en la Comisión de Finanzas sobre cómo es posible que el BCV este año haya quemado 4.120 millones de las reservas solo para hacer un anclaje cambiario”, opinó.
Añadió que la política de anclaje cambiario es absurda e inhumana, porque se ha implementado a costa del salario real de los trabajadores.
“Esta estrategia no garantiza estabilidad cambiaria ni de precios y mucho menos el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB)», aseveró.
Además, Cabezas resaltó que, desde 2021 hasta 2024, se han gastado más de 15.000 millones de dólares de las reservas internacionales, mientras el tipo de cambio paralelo se ha devaluado cerca de un 30 % en lo que va del año.
¿Qué sector de la economía creció?
El docente universitario precisó que el crecimiento económico del que habla la administración de Nicolás Maduro está impulsado en un 57 % por el sector terciario o de servicios, el cual genera poco valor agregado a la economía.
Cabezas señaló que en 2023 el crecimiento fue cercano al 3 % y este año podría situarse entre el 2 % y 3 %, pero destacó que este aumento está concentrado en sectores como farmacias, ventas de alimentos, discotecas y restaurantes, lo que refleja un patrón de consumo que afecta negativamente la producción local. «Es más barato importar en Venezuela que producir».
Importaciones y cartera de crédito
Subrayó que el BCV destinó este año 4120 millones de dólares para importaciones, lo que no solo ha impactado el tipo de cambio, sino también en la producción.
“Hoy casi el 50 % de lo que es producción de bienes y servicios está concentrado en el Área Metropolitana de Caracas, lo que refleja un empobrecimiento muy grande de la población en el interior del país y un estancamiento mayor del PIB en las regiones del sur de Venezuela, los Andes y el Zulia”, declaró Cabezas.
También mencionó que la inversión en Venezuela es apenas el 4 % del tamaño de la economía, en comparación con el 30 % en Chile y el 20 % en Colombia.
Aunado a ello, precisó que la falta de inversión extranjera, el bajo consumo debido a la precariedad de los ingresos laborales, el colapso del sistema de seguridad social y el impago de la deuda externa desde el 2017 antes de las sanciones norteamericanas agravan la situación porque Venezuela quedó fuera del sistema financiero internacional sin posibilidad de recibir préstamos.
«Nuestra economía es cada vez más pequeña, hasta junio la cartera de crédito de nuestro país (lo que prestan los bancos) no llega a 2.000 millones de dólares, muy por debajo de países como Colombia (167.000 millones), Chile (200.000 millones), Perú (144.000 millones) e incluso Nicaragua (5.000 millones)”, argumentó.
Por este motivo, expresó que, de acuerdo con las cifras más optimistas, los niveles de pobreza en el país están en 55 %. Ante esta realidad, recomendó a la población fijar sus prioridades en vísperas de la Navidad.
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...el economista resaltó que el principal requisito para una política económica efectiva es la estabilidad política y social, que permita que las dos grandes variables de crecimiento consumo e inversión se comporten de forma positiva.
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