La líder opositora venezolana María Corina Machado fue galardonada este miércoles con el Premio Nobel de la Paz en Oslo, Noruega.
Por CNN
Machado no pudo estar en la ceremonia de entrega del premio, pero su hija Ana Corina Sosa Machado recibió el galardón en su lugar y pronunció el discurso que la opositora daría en el escenario.
Estas fueron las cinco frases más destacadas del discurso de Machado —leído por su hija— en la entrega del Nobel de la Paz:
Han sido casi tres décadas de lucha en contra de una dictadura brutal. Y hemos tratado todo: diálogo, protestas, elecciones que se han robado. Esto ha colapsado totalmente, ¿y quién puede creer que un futuro puede ser viable en esta situación? Es imposible”.
Entendimos que nuestra lucha era mucho más que una lucha electoral. Era una lucha por la verdad y una lucha existencial por la vida y una lucha espiritual por el bien”.
El pueblo venezolano no se ha rendido. Los últimos 16 meses en la clandestinidad hemos construido nuevas redes de presión civil y hemos disciplinado la desobediencia para preparar a los venezolanos para esta transición hacia la democracia”.
Este premio tiene un gran significado, porque le recuerda al mundo que la democracia es fundamental para la paz. Y más valioso que cualquier otra cosa, lo que nosotros los venezolanos podemos ofrecerle al mundo es una lección forjada en toda esta lucha tan larga y dolorosa que, para tener democracia, tenemos que estar dispuestos a pelear por la libertad. Y la libertad es una decisión que debe renovarse cada día, medida por nuestra disposición y nuestra valentía para defenderla”.
Venezuela va a respirar nuevamente. Vamos a abrir las puertas de los prisioneros y vamos a liberar a los que han sido encarcelados. Le vamos a dar un abrazo a los que nunca dejaron de luchar. Vamos a buscar a las abuelas, vamos a sentar a los nietos en sus piernas para que cuenten las historias no desde la distancia, sino las historias de valentía de sus propios padres. Vamos a ver a nuestros estudiantes debatir ideas de manera apasionada sin miedo. Sus voces finalmente van a poder ser escuchadas. Vamos a abrazar nuevamente, nos vamos a enamorar nuevamente, a llenar nuestras calles de música, todas las alegrías simples que el mundo da por sentadas volverán a ser nuestras”.




