Pese a aceptar el ingreso de la ayuda humanitaria, distribuida por la Cruz Roja, Nicolás Maduro desestima la necesidad de los insumos médicos que llegaron al país, debido a que, según cifras oficialistas, la misión barrio adentro “atiende a muchos más ciudadanos”.
“Llegó una ayuda humanitaria para 10.000 personas. Es bienvenida, perfecto. Pero nosotros hemos atendido a 1.975.000 casos aún con el bloqueo económico y la persecución financiera”, indicó el mandatario.
De acuerdo con las cifras del ministerio de Salud, la misión barrio adentro ha realizado 1.975.000 consultas, con lo que ha subsidiado aproximadamente 80.000 millones. De igual forma, celebra la supuesta ejecución de 720.000.000 de exámenes, con lo que habría ahorrado al bolsillo de los ciudadanos unos 120.000 millones de dólares.
Además de estas cifras, Maduro asegura que diariamente unos 20.000 doctores del país hacen un recorrido “casa por casa” para ofrecer atención médica gratuita. Con esta labor, supuestamente se salvaron 1.779.015 vidas en 16 años.
Los esfuerzos de estos doctores y de 11 misiones cubanas en el país, habría permitido también la atención de 41.000 colombianos en los Centros Diagnósticos Integrales (CDI) ubicados en la zona fronteriza.
De hecho, el ministro de salud, Carlos Alvarado, califica la misión barrio adentro como el “proyecto de salud más grande, innovador e inclusivo de la historia de la humanidad”.
No obstante, estas maravillas difieren con la realidad del sistema de salud venezolano, sumido en una crisis sanitaria, según los informes publicados por organismos internacionales como la Organización Mundial para la Salud (OMS) o la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
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Los estudios que contrastan la realidad expuesta por Maduro reseñan un crecimiento en brotes de epidemias como el sarampión, la difteria o la malaria. En el caso del VIH, Venezuela es el único país de ingresos medios del mundo en el que muchos pacientes se han visto en la obligación de suspender el tratamiento debido a la escasez de medicamentos antirretrovirales, según la OMS.
El senador estadounidense Marco Rubio recuerda que el ingreso de la ayuda humanitaria es un logro de la oposición venezolana al promover la necesidad de aceptar y distribuir insusmos de primera necesidad a los centros hospitalarios del país. “Durante años e incluso ahora, Maduro argumenta que no existe una crisis humanitaria en Venezuela”, expuso el funcionario.
Maduro enfatiza en que profundizará la labor de barrio adentro, con la creación de nuevas farmacias, salas de parto humanizado, capacitación de personal médico, graduación de más profesionales en el área y el apoyo por parte de países como Cuba, China, Rusia, Bielorrusia, la India o Irán.
También pidió a la comunidad internacional que levante las sanciones económicas contra Venezuela. Asevera que con los 1.700 millones de dólares bloqueados en el Novo Banco de Portugal, podrían comprar toda la comida y medicinas que necesita el país. “Que nos devuelvan los 1700 millones que nos robaron en Novo Banco, nos va a sobrar medicina y comida en Venezuela”, insistió.
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Los estudios que contrastan la realidad expuesta por Maduro reseñan un crecimiento en brotes de epidemias como el sarampión, la difteria o la malaria. En el caso del VIH, Venezuela es el único país de ingresos medios del mundo en el que muchos pacientes se han visto en la obligación de suspender el tratamiento debido a la escasez de medicamentos antirretrovirales, según la OMS. El senador estadounidense Marco Rubio recuerda que el ingreso de la ayuda humanitaria es un logro de la oposición venezolana al promover la necesidad de aceptar y distribuir insusmos de primera necesidad a los centros hospitalarios del país. “Durante años e incluso ahora, Maduro argumenta que no existe una crisis humanitaria en Venezuela”, expuso el funcionario.
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