Republica del Zulia

Julio Portillo: Necesitamos entonces promover el regionalismo como protesta al excesivo centralismo en todos los órdenes. Tenemos que despertar la conciencia política de la provincia.

domingo, 24 de septiembre de 2017

Félix Seijas: “La estrategia del gobierno es desactivar el voto opositor”; por Hugo Prieto

Félix Seijas retratado por Roberto Mata

En esta ocasión exploramos los colores que podrían pintar el mapa de Venezuela, una vez que se realicen las elecciones de gobernadores del próximo 15 de octubre. Si el gobierno logra pintar de rojo la mitad de la geografía nacional, la percepción que tendrá la gente, dentro y fuera del país, es que las fuerzas políticas están equilibradas. ¿Cuál sería el argumento que tendría la unidad opositora para denunciar a un gobierno minoritario que cercena derechos constitucionales? Se diluiría una de las principales conquistas alcanzadas durante cuatro meses de protestas y enfrentamientos en las calles que dejó un saldo de 160 venezolanos fallecidos.

Félix Seijas, director de la encuestadora Delphos, estadístico por la Universidad Central de Venezuela y Phd en Análisis de Datos por la Universidad de Southampton, Inglaterra, analiza las variables cualitativas que están en juego. Quedarse en la casa sería tanto como suicidarse en primavera.

Tenemos una Asamblea Nacional Constituyente “plenipotenciaria”, que dispone de la institucionalidad del Estado a su real saber y entender, cuyas atribuciones le permitirían, acatando una sugerencia del presidente Nicolás Maduro destituir a futuros gobernadores, si estos —una vez electos— no se subordinan a su poder. La pregunta es si vale la pena votar, si a fin de cuentas quedamos sujetos a lo que disponga esta instancia, cuya naturaleza es monárquica e imperial.

Lo primero que hay que señalar es que esa Asamblea, ilegítima y cuestionada a nivel internacional, es una realidad, está allí. No la podemos negar. Existe. Entonces, hay que manejar la comunicación en torno a ese tema. Su elección fue interpretada como una derrota, aunque hubo varias victorias allí, pero la gente no lo ve así. ¿Por qué? Por el discurso… hasta que se vaya Maduro, la hora cero, el punto sin retorno… Todo eso planteaba un todo o nada. Pero cuando la gente vio a los constituyentistas juramentándose en el Palacio Legislativo, el golpe fue muy fuerte y la sensación es que lo perdimos todo. ¿Qué fue lo que ocurrió? La oposición trabajó en dos frentes. Uno, trató de impedir que se eligiera la ANC. Dos, si llegase a elegirse, que nazca deslegitimada. Ese segundo objetivo se logró. Son 48 países los que desconocen o están en desacuerdo con esta iniciativa del gobierno. El problema de haber planteado el todo o nada es que la gente no termina de visualizar las victorias que se obtuvieron.

El problema es que ese planteamiento del todo o nada ha sido una constante en cada episodio —electoral o no—, en que se ha jugado la confrontación política. En paralelo corre esa sensación de derrota. Vamos a la elección de gobernadores, imbuidos en un estado de ánimo en el que predomina la confusión, por decir lo menos. ¿Cuál es la perspectiva?

La MUD tiene varios problemas, uno de ellos es la dificultad que tiene para llegar a acuerdos o concertar decisiones. Tú no puedes transmitir lo que no tienes. La gente empieza a percibir eso. Lo vimos en medio de las protestas de este año y también en el marco del diálogo que tuvo lugar en 2016, así como en la ronda que comienza en República Dominicana. El mensaje no llega, porque tienes problemas de comunicación, porque ni siquiera tienes un vocero único. Eso crea una confusión tremenda. Ante ese vacío, la gente empieza a llenar los espacios, según su propia experiencia y lo que va percibiendo… ¡Ah, Estos son unos traidores… estos nos vendieron, estos están negociando con el gobierno… Todas esas son opiniones que llenan el vacío que dejan los problemas de comunicación. Realmente, las organizaciones que integran la MUD, cuyos intereses son distintos y eso es natural, no han podido establecer una estructura para llegar a esos acuerdos, ni tampoco hay una estructura para comunicarlos.

Sí tomamos en cuenta los argumentos de voceros calificados de la academia, aquí hay mil razones para ir a las elecciones regionales, pero también hay otras mil razones para no ir. No creo que sea un problema argumental. Esto es algo de mayor envergadura. ¿Quizás de convicción, digamos, o de compromiso con una política que aglutine a todos aquellos que se identifican como opositores?

La decisión se tomó. Y la manera de invitar a la gente para que te acompañe, es explicarle los motivos que te llevaron a tomarla. Eso, además, tiene que sonar coherente. Tiene que haber una conexión con lo que viene. Es decir, ¿Cuál es tu objetivo principal? El cambio político. Estamos hablando de cambio de modelo, de cambio de gobierno. Pero si no eres capaz de conectar tus acciones con ese objetivo principal, la gente se va a perder y no va a valorar el esfuerzo que estés haciendo o la acción que estás llevando a cabo. ¿Cómo esto encaja en ese rompecabezas que es producir un cambio de gobierno? Ahí está la clave. Si no logras que la gente haga esa conexión, estas elecciones regionales pierden valor para esas personas. Pero, en cambio, si la gente ve dónde encaja perfectamente esa pieza y la utilidad que tienen dentro del trayecto que te va a llevar al objetivo principal, te va a acompañar de inmediato. Lo va a entender. Y los convencidos se van a convertir en factores multiplicadores del mensaje.

Leer mas: http://prodavinci.com/2017/09/24/actualidad/la-estrategia-del-gobierno-es-desactivar-el-voto-opositor/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario