Durante la sesión, que no arrojó resultados claros, la canciller venezolana pidió la renuncia del secretario general del organismo.
El gobierno venezolano no pudo impedir que la sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) realizada ayer en Washington abordara la "crisis humanitaria" que vive ese país.
Tras la intervención del Secretario General, Luis Almagro, los países se limitaron a expresar su posición, pero no pasaron al fondo de la cuestión que era determinar si coincidían o no con el Secretario y si era necesario activar la Carta Democrática.
La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, había pedido rechazar el único punto del día a tratar, por considerarla "un golpe de Estado" contra su gobierno.
Venezuela perdió por 20 votos frente a 12. Votaron a favor de que se celebrara la sesión 20 países: Uruguay, Surinam, Paraguay, Perú, Panamá, México, Jamaica, Honduras, Guyana, Guatemala, EE.UU., Costa Rica, Colombia, Canadá, Chile, Brasil, Belice, Barbados, Bahamas, y Argentina.
Votaron en contra San Vicente y las Granadinas, San Cristóbal y Nieves, República Dominicana, Nicaragua, Haití, Granada, El Salvador, Ecuador, Dominica, Bolivia, Venezuela y El Salvador. Se abstuvieron Trinidad y Tobago y Santa Lucía.
"¿A dónde hemos llegado? ¿Qué puertas estamos abriendo? ¿Qué precedentes estamos sentando?", cuestionó Rodríguez apenas se abrió la reunión.
"Derrotados"
El líder opositor venezolano Henrique Capriles dijo que la votación fue una derrota para el Presidente Nicolás Maduro. "Derrotados en el orden del día Maduro y sus enchufados en la OEA, nuestro Pueblo y nuestra Venezuela no está sola", escribió el dos veces candidato presidencial en su cuenta de Twitter.
José Miguel Vivanco, director para las Américas de la ONG Human Rigths Watch, dijo que "tras la histórica sesión, donde una mayoría de países rechazó el intento de Venezuela para cerrar la discusión internacional sobre la situación en el país, Maduro quedó bajo la mira de la OEA".
El abogado chileno agregó que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, "sobresalió con una valiente y honesta intervención sobre la gravísima crisis que aqueja a Venezuela, legitimando a la OEA como foro para fiscalizar el cumplimiento de Venezuela con sus obligaciones jurídicas internacionales en materia de derechos humanos y democracia. Maduro deberá ahora corregir sus prácticas y mostrar resultados concretos".
Leer más: http://diario.elmercurio.com/2016/06/24/internacional/internacional/noticias/72DC0AAB-3CCB-49FA-9E43-EAF919A215BE.htm
No hay comentarios.:
Publicar un comentario