Como es costumbre, cada último sábado del mes de octubre, la devoción del pueblo zuliano se aviva con la Bajada de La Chinita. Miles de feligreses inundan la plazoleta de la Basílica para reencontrarse con su patrona bajo los acordes de las gaitas que se componen en su honor
Para este año La Chinita descenderá a través de un escenario acuático, que recordará su llegada por primera vez a las calurosas tierras zulianas. Para el padre Richard Colmenares, vicario de la Basílica, la Bajada de la Virgen es la antesala a su mes, que es noviembre.
Colmenares manifestó que se tiene previsto la visita de unas 15 mil personas para el gran acontecimiento mariano.
Origen de La Bajada de la Virgen
Es una tradición originaria de Andalucía y en Maracaibo se viene realizando desde el siglo XVIII aproximadamente; aunque es desde 1942 -según el coordinador del Acervo Histórico del Zulia, José Gregorio González-, que el culto de la Virgen de Chiquinquirá toma notoriedad porque es cuando se termina de hacer la corona para La Chinita.
González destaca la gran cantidad de personas que visitan en estas fechas a la Virgen para pagar promesas.
Por su parte, el padre Eleuterio Cuevas, párroco de la Basílica Nuestra Señora de Chiquinquirá, define la manifestación religiosa como el acercamiento "de la deidad con el pueblo que la venera y reconoce como un ser superior".
Cuevas explica que hubo 10 años, desde 1960 hasta 1970, en los que no hubo continuidad en la Bajada, debido a la falta de claridad en la Reforma del concilio vaticano.
No fue sino hasta después de 1970, gracias a Monseñor Lückert León, que se le da un realce motivado por la situación que vivían los habitantes de El saladillo con la demolición de las 400 manzanas que formaban ese sector.
Para esas fechas las personas estaban emigrando a otras latitudes de la región y la manifestación les permitió congregarse otra vez y retomar las tradiciones que se hacían antes de 1960.
El padre Cuevas considera que este acontecimiento ha dejado de ser parroquial para convertirse en una celebración regional y hasta internacional, puesto que también se organiza "en Las Islas Canarias, Madrid, Miami, Orlando, California, Canadá y donde quiera que haya un maracucho".
Gaitas para La Chinita
Las gaitas de Los Chiquinquireños comenzaron como una promesa y se ha convertido en una tradición que busca difundir y cimentar la fe. Por más de 12 años han acompañado a La Virgen en sus fechas más importantes: Bajada, cumpleaños y cuando nuevamente sube.
El compositor Carlos Luis González, quien forma parte de Los Chiquinquireños desde el 2002, expresa que "Los Chiquinquireños es mucha gente y cada uno pone un granito de arena".
Para él, el momento de la Bajada "es muy efusivo y especial. Hay que vivirlo. Hay que estar allí para entender lo que se siente".
Los Chiquinquireños desde hace algunos años también acompaña a la Divina Pastora en su procesión cada 14 de enero.
El recorrido de excelsa patrona
Este 31 de octubre a las 11.00 de la mañana se iniciará la procesión lacustre de La Chinita por los pueblos costeños. El punto de partida es el puerto pesquero que está frente a la Milagrosa.
El 7 de noviembre, la tercera Caminata chiquinquireña inundará las calles de la característica fe zuliana. La caminata saldrá de tres puntos: el Centro Comercial Doral Center con la imagen de San Andrés, en la zona sur desde la Plaza de Las Banderas con Nuestra Señora de Chiquinquirá y en la zona noroeste, desde La Curva de Molina con la representación de San Antonio. Los caminantes se encontrarán en la Plazoleta de la Basílica.
El 18 de noviembre se efectuará la eucaristía y procesión solemne en la Basílica. Así como también el tradicional juego de La Chinita en el estadio Luis Aparicio.
El 4 de diciembre la Virgen vuelve a su lugar luego de la procesión de La aurora.
Noticia al Día
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