Vos sabéis que en el año 1953 el Concejo Municipal de Maracaibo aprobó la ordenanza de urbanismo, que establecía el primer plano regulador de la ciudad. En el mismo se consideraba el borde Este de la avenida El Milagro como zona verde.
Nuestro Lago ha sido el eje de nuestra historia, incluso mucho antes de la llegada de los españoles, ya ese emporio de agua servía de centro motriz en el desarrollo de nuestros pobladores. Debido a su privilegiada situación geográfica, el Lago siempre ha tenido un valor estratégico económico inigualable.
En el gobierno de Carlos Andrés Pérez se aprueba que una parte de sus orillas sirva como fuente de esparcimiento y recreación. Basado en ese concepto se emitió el decreto de la Presidencia de la República 1267 del 11 de noviembre de 1975, relativo a las obras del Paseo del Lago de Maracaibo.
En el referido decreto: Se declara zona especialmente afectada para la construcción del Paseo del Lago un lote de terreno y demás bienes en él existentes, cuya superficie aproximada será de 365 hectáreas.
La primera etapa de lo que sería este parque recreativo fue inaugurada en 1978 y al pasar de los años se traspasó a la Alcaldía de Maracaibo y su nombre fue cambiado por el de Vereda del Lago. El 25 de septiembre de 2001, fue creado como Parque Metropolitano, y en 2005, fue constituido como Servicio Autónomo Vereda del Lago.
Hoy los maracuchos gozamos de las bondades recreativas de este espacio con vista a los marullos que afanosamente chapotean sus orillas, pero todavía hace falta más. Es urgente que los marabinos impulsemos la expansión de zonas recreacionales a lo largo de nuestras orillas, acompañadas de paseos turísticos marítimos que conecten a nuestros niños y jóvenes con este inmenso reservorio.
Que el amor por el Lago no se pierda. Que las autoridades municipales venideras se comprometan con proteger estos espacios del acostumbrado abandono oficial y los conviertan en referentes de belleza, vida y turismo para Maracaibo, el Zulia y todo el país.
- Que ese paisaje y Maracaibo sigan inspirando versos y sueños por generaciones. Pá que vos sepáis.
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