embajada de argentina refugiados
Los refugiados en la embajada de Argentina salieron en libertad el martes 6 de mayo Credit: Captura EFE

Las reacciones de los diferentes políticos internacionales sobre la salida de los opositores venezolanos refugiados en la sede de la embajada de Argentina en Caracas ha sido bastante tímida. De momento, son los estadounidenses quienes celebran una presunta extracción liderada por el gobierno de Donald Trump y donde habrían participado otros gobiernos. 

La información fue bastante compartida por políticos nacionales, quienes en su mayoría celebraron la salida de los opositores refugiados desde el 20 de marzo de 2024. No obstante, el chavismo se mantiene en silencio y apenas se expresa a través de algunos comunicadores alineados con figuras de peso en el gobierno criollo. 

Hasta ahora la versión dominante es la narrada por Estados Unidos, apoyada por Argentina y María Corina Machado: una operación de extracción calificada como “impecable, precisa y épica”. Sin embargo, llama la atención que después de tantas horas, los allegados a Nicolás Maduro se mantengan en silencio. 

Mientras tanto, otras personas aseguran que sí ocurrió una negociación y que dicha operación no fue tan épica como se trata de presentar. El viaje de Nicolás Maduro a Rusia lo hace todo más curioso, pues, en teoría, el líder chavista asumiría responsabilidad en este evento si se tratase de alguna negociación, como ha ocurrido en el pasado. 

Políticos estadounidenses celebran la salida de los refugiados en la embajada de Argentina

Tras más de un año de solicitudes de salvoconductos a Miraflores, pareciera que varios gobiernos decidieron implicarse en una operación de extracción que habría puesto a agentes de seguridad en la ciudad de Caracas para sacar a los opositores que estaban refugiados en la residencia diplomática argentina. 

Aunque esa versión parece sacada de una película de acción de Hollywood, hasta ahora es la matriz que se ha impuesto. Al menos apoyada por vocería oficial. Mientras tanto, el chavismo sigue en silencio. No es el caso de comunicadores y personas cercanas a figuras del peso en el Partido Socialista Unido de Venezuela, quienes han salido anticipadamente a decir que todo lo ocurrido era de pleno conocimiento por las autoridades y que, efectivamente, María Corina Machado había negociado la salida de estas personas a cambio de algo. 

El activismo venezolano también se ha mostrado con cautela sobre este tema. Los que sí celebran públicamente son algunos senadores y representantes norteamericanos, quienes aplauden la presunta acción del gobierno de Donald Trump. 

En España, la respuesta también ha sido tímida. La diputada en el congreso por Madrid, Cayenata Álvarez de Toledo, es una de las pocas dirigentes ibéricas en expresar su apoyo a lo ocurrido. 

El representante de Florida, Mario Díaz-Balart, dijo estar complacido al saber “que estas personas ya están a salvo en tierras estadounidenses”.

El mensaje de este político es particularmente importante porque es el único que se ha atrevido a decir el lugar en donde estarían los opositores venezolano. No obstante, esta información no ha sido reafirmada por ningún otro dirigente y mucho menos por Marco Rubio, secretario de Estado de EEUU.