El CNE autorizó la participación de 36 partidos nacionales para el 25 de mayo
Este 14 de abril, el diputado y experto electoral, Aníbal Sánchez -no el Consejo Nacional Electoral, CNE- divulgó una imagen en la que se aprecian las posiciones escogidas por 36 partidos políticos de carácter nacional en la boleta electoral de los comicios regionales y parlamentarios fijados para el 25 de mayo.
El ente comicial, presidido por Elvis Amoroso, sigue sin pronunciarse sobre ninguna etapa de la organización del proceso. Las postulaciones de candidaturas que transcurrieron del 7 al 13 de abril, así como los rechazos y admisiones no han sido la excepción. El acto de escogencia de la posición en la boleta tampoco fue público como en elecciones anteriores.
En el “ecosistema” partidista para los venideros comicios se observan en su mayoría tarjetas electorales “confiscadas” por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y organizaciones aprobadas de manera “exprés” por el CNE para que pudieran entrar en el actual proceso.
También destacan, pero por ausentes, las dos tarjetas más votadas el pasado 28 de julio: una porque sus responsables no avalan estas elecciones (la MUD) y otra, Movimiento por Venezuela (MPV), porque no fue admitida.
“Básicamente son los mismos partidos de la elección presidencial, pero con la ausencia de MPV, la MUD y Centrados y la adhesión de Unión y Cambio. Desde 2016, el CNE dejó de ser riguroso en la constitución de las organizaciones con fines políticos; no hay un criterio claro en los requisitos para que una organización se mantenga o si se cumplen o no los requisitos para ratificar a un partido”, comentó el director del portal de análisis electoral, Votoscopio, Eugenio Martínez, sobre el “nacimiento” de algunas tarjetas y la anulación de otras.
Recordó que para las presidenciales 2024, el ente comicial aplicó distintos criterios a la hora de permitir “a última hora” la incorporación de partidos políticos o la desincorporación, también de último minuto, de algunas organizaciones.
El “chiripero” de Maduro
El chavismo y sus aliados en el Gran Polo Patriótico postulan para el 25 de mayo con 13 tarjetas, de las cuales cinco son judicializadas y al menos cuatro “exprés”. La que encabeza la boleta electoral es la del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), cuya imagen (con el rostro de Hugo Chávez completo y no solo sus ojos) fue refrescada para las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024.
En alianza con el Psuv también postulan candidatos a gobernadores, a los Consejos Legislativos y a la Asamblea Nacional (AN) las tarjetas de partidos intervenidos por el TSJ entre 2020 y 2023; a saber: Partido Comunista de Venezuela (PCV), bajo el control legal de Henry Parra; Tupamaro, de Williams Benavides; y Patria Para Todos (PPT), de Ilenia Medina.
Asimismo, el Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), de Gilberto Jesús Jiménez Prieto, intervenido desde 2015; Podemos, afectado por la misma medida judicial desde 2012, con Didalco Bolívar; Organización Renovadora Auténtica (ORA); Unidad Popular Venezolana (UPV) fundada por Lina Ron; Somos Venezuela atribuido a Delcy Rodríguez que entró a la escena electoral en 2018 con las presidenciales de manera “exprés” y Alianza para el Cambio, de Ricardo Sánchez.
Partidos Verde y Futuro, vinculados a Héctor Rodríguez, salieron a escena el 28 de julio de 2024, aprobados de manera “exprés” por el CNE para postular la candidatura de Nicolás Maduro. También Enamórate, de José Antonio España; este exdirigente del Movimiento al Socialismo (MAS), de Primero Justicia (PJ) y de Prociudadanos, además de exdiputado nacional, fue autorizado para postular desde las pasadas presidenciales, igualmente de manera sobrevenida.
Solo Futuro, Verde y Enámorate no tienen representación en la AN de 2020, dominada por el chavismo.
“La ley (de partidos políticos) dice que para registrar un partido político tiene que recoger firmas que equivalgan a 0,5% de los electores registrados en al menos 12 estados. Eso, en algún momento era una recolección de firmas que el CNE normaba y eso se convirtió en un saludo a la bandera”, sostuvo Martínez.
Considera que dichas aprobaciones “exprés” de nuevos partidos o anulación de tarjetas obedecen a una estrategia que busca evitar “disidencias” en el GPP y al mismo tiempo fomentarlas entre todos los que adversan a la coalición gobernante.
Al anunciar que el Psuv instalará comandos de campaña en todo el país, Maduro destacó el número de partidos participantes en el evento electoral, lo que lo convierte, según afirmó, en un gran proceso “democrático”.
A casi nueve meses de las presidenciales del 28 de julio, el CNE que anunció como ganador a Maduro sigue sin publicar los resultados electorales en Gaceta. Pese a las denuncias de fraude de la oposición, tampoco ha mostrado las actas de votación que permitirían comprobar qué candidato resultó electo.
Las tarjetas de la “oposición aliada”
Otro bloque de 13 tarjetas que postulan en alianza para la mayoría de los cargos a elegir el 25 de mayo es la llamada Alianza Democrática, conformada por organizaciones con representación de 20 diputados en la AN de 2020.
Su dirigencia asegura ser opositora a la administración de Maduro, pero aprueban todo lo que propone el Psuv en el Parlamento, acompañan los llamados a “diálogo” de Miraflores, sin condiciones y son férreos críticos de la oposición mayoritaria que encabeza María Corina Machado, para cuyos integrantes incluso han pedido prisión. Se suman a esta alianza otras organizaciones fuera del Parlamento.
De este lado también hay organizaciones intervenidas judicialmente entre 2015 y 2020. Es el caso de las tarjetas de Acción Democrática (AD) en poder del diputado nacional Bernabé Gutiérrez; de Copei con el también diputado Juan Carlos Alvarado; de Primero Justicia (PJ) bajo el control del parlamentario José Brito, quien además tiene la tarjeta de Primero Venezuela, creada de manera exprés para las parlamentarias de 2020.

Asimismo, en la boleta aparece la tarjeta de Voluntad Popular (VP) en poder del exalcalde de San Cristóbal y excandidato presidencial, Daniel Ceballos, a quien igualmente le avalaron de manera exprés la organización Arepa Digital para el 28 de julio de 2024. Igualmente la tarjeta de Bandera Roja con Pedro Veliz, quien por orden del TSJ desplazó la autoridad legal de Gabriel Puerta Aponte en 2015.
El exconsultor jurídico del CNE, Celiz Mendoza, subrayó que el ente que determina quiénes son las autoridades legítimas de una organización política es la Oficina Nacional de Participación Política, según el artículo 68 de la Ley Orgánica del Poder Electoral (LOPE) y no el TSJ. Advirtió que la Sala Constitucional minó la competencia del ente comicial al declarar la intervención de los partidos mencionados e imponer nuevas autoridades.
La Alianza Democrática también inscribió candidatos con las tarjetas de El Cambio, del diputado Javier Bertucci; Avanzada Progresista, del diputado Luis Romero; Unidad Visión Venezuela, del diputado Omar Avila; Cambiemos, del legislador Timoteo Zambrano; Movimiento Republicano y Venezuela Unida, del diputado Luis Parra.
Sobrevive UNT y aparece Unión y Cambio
De las tarjetas que inscribieron la candidatura presidencial de Edmundo González el 28 de julio solo “sobrevivió” para el 25 de mayo Un Nuevo Tiempo (UNT), de Manuel Rosales, candidato a la reelección para la Gobernación del Zulia.
La gran novedad de este proceso es la tarjeta de Unión y Cambio, vinculada al dirigente político Henrique Capriles, señalada igualmente de ser avalada de manera “exprés” por el CNE, producto de negociaciones políticas. El exgobernador de Miranda también había sido inhabilitado por 15 años, desde 2017, pero apareció habilitado para el 25 de mayo, como candidato a la AN.
“La aprobación o anulación de un partido político debe ser un acto administrativo motivado del CNE, no una decisión personal de algún funcionario o capricho. La manera como se han manejado las cosas lleva a dudar si la tarjeta Unión y Cambio cumplió con los requisitos para postular como partido nacional y escoger esa posición preferencial en la boleta, por encima de otros partidos que ganaron votos en elecciones pasadas, nacional o regional”, sostuvo Mendoza.
De cara al 25 de mayo, tampoco pasó el “filtro” la tarjeta de Centrados que postuló la candidatura presidencial de Enrique Márquez – hoy preso político- para el 28 de julio. El MAS, Puente y Unión y Progreso que quedaron fuera de las presidenciales 2024, también pidieron participar este 25 de mayo, pero fueron ignoradas por el ente comicial.
Un aspecto no menos importante, mencionó Mendoza, es que para este proceso electoral al parecer no se lograron constituir grupos de electores así como inscripciones de candidaturas por iniciativa propia, porque en un apretado cronograma que el CNE no hizo público de manera oficial sólo se dio uno o dos días para hacer ese trámite. Ello, recalcó, viola derechos políticos, entre ellos el derecho a elegir y ser elegido.
¿Qué tarjetas completan la boleta electoral?
De acuerdo con Sánchez, otra pequeña alianza la integran las tarjetas de Fuerza Vecinal (FV), Min Unidad, creada para las parlamentarias de 2015 y señalada de quererse confundir con la tarjeta de la MUD, y Movimiento Ecológico. FV comparte de manera parcial otras candidaturas con la Alianza Democrática e incluso con UNT, como es el caso del abanderado a la reelección para la Gobernación de Nueva Esparta, Morel Rodríguez.
Soluciones, de Claudio Fermín, fue igualmente avalado para los venideros comicios, al igual que Derecha Democrática Popular (DDP), de Luis Ratti, que fue otra tarjeta “exprés” para las presidenciales 2024. De igual forma postuló Alianza del Lápiz, de Antonio Ecarri, que aunque van “solos” en la lista nacional de la AN apoya otras candidaturas como la de Rosales en el Zulia.
Completan el cuadro CONDE que inscribió la candidatura del comediante y empresario Benjamin Rausseo a la Gobernación de Anzoátegui y la tarjeta de Unión Nacional Electoral (UNE), del diputado Carlos Melo, que salió a escena en las presidenciales de 2024, apoyando la candidatura de Luis Eduardo Martínez.
Sobre la escogencia de las posiciones en la boleta por parte de los partidos nacionales, Mendoza también advirtió que la forma como se presenta indica que tienen preeminencia sobre las organizaciones regionales. Al respecto aclaró que si en un estado cualquier tarjeta distinta al Psuv, obtuvo la mayor cantidad de votos en las elecciones regionales de 2021, ese partido tiene derecho a ser el primero en escoger el puesto de su preferencia en el tarjetón.
“Se le impone a las regiones el orden nacional. El tarjetón de cada estado es distinto porque están los partidos de cada región con derecho a escoger su posición en la boleta según el orden por votación obtenida. Se trata de una elección regional en la que se escogen gobernadores y Consejos Legislativos y se une la lista a la AN por cada estado y los diputados nominales por circuitos. Es la complejidad de unir elecciones distintas, debieron separarse”, agregó el abogado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario