La transición en Venezuela es posible y el 10 de enero, en eso coinciden Carmen Beatriz Fernández, doctora en Comunicación Pública y consultora política de DatastrategIA, como para Griselda Colina, experta en materia electoral, fundadora y directora del Observatorio Global de Comunicación y Democracia al analizar la situación que enfrenta Venezuela cuando falta menos de un mes para la jura presidencial. 

“El gobierno está luchando por legitimarse, que su gente vuelva a creer en ellos. Aquí hay mucha gente que sabe, que fueron testigos del Psuv, que saben que la verdad es que ganó Edmundo González Urrutia”, dijo Colina al iniciar su intervención en el Con la Luz de esta semana.

La experta aseguró que la coalición dominante “intenta pasar la página” en materia electoral, pero que la oposición enfrenta la situación insistiendo ─y aportando pruebas─ del triunfo del abanderado de la Unidad. 

“El 10-E con un cambio podría ser una salida semi digna para proteger los intereses de los que están en el gobierno. Es un cambio y es el mejor escenario para quienes están en el poder hoy porque la nomenclatura del poder tiene muchas cartas en juego y podría negociar”, dijo Fernández en su comentario inicial. 

La consultora de DataestrategIA detalló que para el próximo 10 de enero hay dos grandes escenarios: continuidad o cambio. “Porque es el mejor escenario para el chavismo dejar el poder, porque hasta el 10-E solo se ocultaron los resultados. El 11 de enero hay una usurpación del poder”, enfatizó.

Gobernar sin legitimidad

Tanto Colina como Fernández coincidieron en que el venidero gobierno de Maduro sería un ejercicio del poder sin legitimidad. 

“Entonces Maduro tendría un gobierno sin partido, sin apoyo popular y sin las Fuerzas Armadas, el hecho que Maduro tenga un control sobre el generalato de la Fanb no quiere decir que tenga el apoyo de las fuerzas armadas. Este es un gobierno que significaría una ruptura constitucional y republicana”, explicó Fernández. 

Colina dijo que si Maduro se mantiene en el poder sería a sangre y fuego, con represión y con violación de derechos humanos, tal y como se ha visto hasta ahora. Sin embargo, la fundadora de Observatorio Global de Comunicación y Democracia subraya que dentro de los venezolanos hay una voluntad estructural de cambio que no se puede desoír. 

“El electorado cambió. El chavismo se mantiene solo con la represión, no se han logrado legitimar ni dentro de su propio partido. Dañar el liderazgo opositor es lo que busca el gobierno de Maduro con factores políticos, económicos y sociales para intentar decir que hay que normalizar”, sostuvo. 

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