Techos que parecen coladores, sistema de aguas servidas deteriorados, paredes que se caen y una serie de filtraciones, así se encuentran la mayoría de escuelas públicas del país, según denunciaron educadores, dirigentes sindicales y representantes de Caracas y de los estados Miranda, Lara y Zulia
filtraciones, así se encuentran la mayoría de escuelas públicas del país, según denunciaron educadores, dirigentes sindicales y representantes de Caracas y de los estados Miranda, Lara y Zulia
“Señores, nos quedamos aquí en la Escuela Pedro Felipe Ledezma (de Carapita, en Caracas). Se inundó, estamos en alerta, el agua se está metiendo y saliendo por las pocetas”, así denunció un obrero la difícil situación que se registró el 16 de septiembre, cuando los docentes y personal educativo tuvieron que agarrar las escobas para sacar la gran cantidad de agua que anegó la estructura.
La Federación Venezolana de Maestros (FVM) advirtió en una rueda de prensa que 60 % de las escuelas en el país están en pésimas condiciones para ofrecer clases, y que esta misma frase la repitieron hace un año, por lo que el panorama poco ha cambiado para este lunes 30 de septiembre cuando inicia el nuevo año escolar 2024 – 2025, según denunciaron los educadores y representantes de los diferentes estados del país a El Pitazo.
“Hemos observado que en su mayoría los planteles están bastante deteriorados, con varias problemáticas con relación al alumbrado eléctrico, a filtraciones de agua, que se incrementan por la temporada de lluvia, y además, los techos y paredes se están cayendo. Incluso en algunos casos el agua servida está saliendo por las pocetas o las cañerías”, aseguró el domingo 29 de septiembre Raúl Parra, secretario de Legislación Laboral Negociación, Convención Colectiva Trabajo y Reclamos del Sindicato Venezolano de Maestros (Sinvema DC).
Parra constató esta situación tras realizar un recorrido por más de 20 instituciones caraqueñas, lo que le permite asegurar que los planteles educativos no están adecuados para iniciar el nuevo año escolar y que los niños pueden no pueden recibir clases en unas instituciones educativas que están en tan precarias condiciones. Algo que también advierten educadores y dirigentes sindicales del estado Miranda.
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Los problemas de infraestructuras también se repiten en el estado Lara, donde el presidente del Colegio de Profesores de la entidad, Luis Arroyo, aseguró que 80 % de las más de 2.000 escuelas en la entidad no tienen condiciones mínimas en su infraestructur para atender a la población estudiantil, que asciende a más de 350.000 estudiantes, según cifras compartidas por la Gobernación.
Roymer Durán, presidente de la Federación Venezolana de Maestros (FVM) en el municipio Acevedo de Barlovento, señaló a El Pitazo que estos problemas también se registran en la entidad, donde los pizarrones están dañados en la mayoría de las instituciones; faltan pupitres; los baños están colapsados; no hay agua y el servicio eléctrico es deficiente.
“En la Unidad Educativa San Rafael hay una matrícula de 128 alumnos, desde inicial hasta sexto grado, pero solo 48 pupitres están en buen estado. A esto se suma que los estudiantes se mojan cuando llueve, porque el agua se filtra por los techos”, dijo Durán, luego de recorrer 22 planteles hasta la mañana del 27 de septiembre.
Ese mismo problema de filtración en techos y paredes existe en la Concentración Nacional 3626, ubicada en el sector Tomuso del municipio Independencia de los Valles del Tuy, según denunció el licenciado Asael Méndez, directivo del Sindicato de los Trabajadores de la Educación del Estado Miranda (Sitrem).
Techos que parecen un colador
“No se puede dar clases en estas condiciones. Los techos de esta escuela parecen un colador y esta situación es recurrente en los colegios y liceos de los Valles del Tuy. Es una irresponsabilidad que el exgobernador de Miranda y actual ministro de Educación, Héctor Rodríguez, anuncie el inicio de las actividades escolares en el nivel inicial, con una infraestructura casi en el suelo y abandonada”, señaló Méndez a El Pitazo.
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Méndez también denunció que en el Complejo Educativo Cartanal los baños están sin agua y la maleza cubre gran parte de la infraestructura que, además, carece de pintura. “En esta institución ni siquiera hay director”, acotó.
Hizo mención a un caso puntual que ocurre en la Escuela Estadal Félix Manuel Luces en Mopia, “la cual hay que tumbarla y levantarla de nuevo, porque prácticamente está en el suelo”.
También mencionó que a una docente, a quien le asignaron un grado recientemente en el liceo estadal 15 de Octubre, le indicaron que debe acondicionar el salón de clases, dotarlo de pupitres y pizarrón. “Es inaudito a donde hemos llegado”, denunció.
Lo que más lamentó el dirigente sindical Raúl Parra es que este lunes con inicio del año escolar el Gobierno de Nicolás Maduro solo mostrará las pocas instituciones que se encuentran en buenas condiciones mientras la mayoría de los niños venezolanos ven clases en salones grises, con pisos deteriorados o sin servicios públicos.
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“La calidad educativa no viene solamente de un maestro o profesional excelente sino de una institución que se encuentre en buenas condiciones y que tenga todo lo que un niño necesita para poder educarlo, en conocimiento, en principios, en valores, y los planteles no lo tienen”, sentenció.
Colaboraciones para recuperar las escuelas
Ante la precariedad de estas instituciones, algunos directivos y educadores decidieron solicitar colaboraciones monetarias o de productos de limpieza para realizar algunos trabajos de mantenimiento de la infraestructuras escolares.
“Me piden 20 dólares. Veré si hablo, ya que son dos hijos que voy a tener (en ese colegio)”, comentó a Alexander a las afueras de la Unidad Educativa Nacional Alejo Fortique de Baruta, estado Miranda. Este padre desconocía si el monto era por cada uno de sus hijos o por ambos.
Sin embargo, hay planteles que piden montos más bajos, como un dólar, y productos de limpieza como un cloro, un desinfectante y bolsas negras, como sucedió en la Unidad Educativa Nacional Andrés Bello, de la parroquia Antímano.
Una profesora de la Unidad Educativa Nacional Bolivariana Conopoima explicó que la única forma de realizar las reparaciones fue el apoyo de los padres y representantes, algo que también sucedió en Unidad Educativa Nacional Andrés Bello gracias a sus aportes se iluminó el salón de los estudiantes de sexto grado de primaria.
“Con colaboraciones hemos arreglado el salón. ‘Colaboración pa’ esto’, ‘colaboración pa’ aquello’, y fueron ellos los que iluminaron un poquito el salón”, dice una madre caraqueña que tiene a su hijo en ese plantel. No obstante, advirte que «esa escuela se está viniendo abajo”. “El salón está oscuro y las paredes no tienen friso», lamentó.
Desvalijan escuelas
El hampa hizo de las suyas en las escuelas del estado Miranda y de Caracas durante el periodo vacacional y desvalijó el Instituto de Educación Especial Francisca Antonia Rodríguez, ubicado en Guarenas, y la Unidad Educativa República Venezuela, en la parroquia El Valle.
“Desde julio hasta septiembre los delincuentes se llevaron el cableado eléctrico, las tuberías de aguas blancas, las láminas de drywall que estaban en los techos de 9 salones, así como los tomacorrientes de la cocina, del comedor y de las aulas. Además, causaron destrozos en los 16 salones, dañaron las luminarias y las puertas de los estantes y cargaron con el material didáctico”, señalaron representantes de este plantel.
Los voceros destacaron que la falta de los servicios de agua y energía eléctrica dificulta el inicio del nuevo año escolar en este plantel que está adscrito al Ministerio de Educación (Mpppe). En esta sede estudian 54 alumnos, con edades comprendidas entre 3 y 15 años de edad, con Trastorno del Espectro Autista (TEA), parálisis cerebral, retardo mental y síndrome de Down.
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En el caso de la Unidad Educativa República Venezuela, los docentes denunciaron que esta situación se ha presentado durante varios años escolares y el presidente de Sinvema Distrito Capital, Édgar Machado, dijo que le causa dolor porque con estas acciones se dañan las pocas labores que pueden realizar para mantener las escuelas en pie.
Sin servicios públicos
En el occidente del país la situación es similar. Al menos 100 niños en Maracaibo, estado Zulia, inician este lunes 30 de septiembre las clases en una escuela que no tiene servicios públicos, donde los pupitres son escasos y sólo cuentan con un baño y un sólo sanitario.
En la Escuela Básica Estadal Delia Huerta, ubicada en el sector Panamericano, no hay electricidad desde hace 8 años y tampoco llega el agua por tubería. La falta del servicio eléctrico supone un desafío para el personal docente y los alumnos, quienes asisten a clases con temperaturas que llegan a los 38 grados centígrados.
“Algunas veces los niños se fatigan y hasta se desmayan por el calor, y algunos no comen bien. Yo quisiera comprarles ventiladores recargables, pero no gano para eso. Lo más duro no es no tener los libros, sino trabajar en estas condiciones”, contó la maestra Ana Pirela, quien devenga 225 bolívares quincenales, cerca de unos siete dólares.
De los 12 salones que tiene la institución, sólo están habilitados 6, el resto sirven como nidos de palomas y murciélagos. En los pizarrones se pueden leer clases viejas lecciones de matemáticas y lenguaje, que ni siquiera el tiner puede borrar, y que dificulta el entendimiento a los niños.
La directora del plantel, Ana Karina Prieto, aseguró que no tienen suficientes pupitres. “Si se inscriben alumnos nuevos, no tenemos dónde sentarlos. Pedimos a los gobiernos e instituciones que nos colaboren, así sea con pupitres viejos que nosotros los reparamos”, insistió.
Prieto dijo que la limpieza de los salones, pintura de las paredes y material de apoyo para el inicio de clases se logró por la autogestión. “Entre los docentes, padres, representantes y miembros de la comunidad, logramos acomodar los salones y limpiar algunas áreas”, dijo mientras sostenía un machete con el que quitaba la maleza de una de las caminería.
La Federación Venezolana de Maestros calculó que al menos 50 % de las 2.600 escuelas públicas que hay en Zulia no están en condiciones idóneas para el inicio del año escolar 2024-2025.
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