El Grupo de los Siete (G7), a través de sus ministros de Exteriores, señaló que los resultados de las elecciones presidenciales en Venezuela carecen de “credibilidad y legitimidad democrática”, y solicitó que un panel independiente verifique las actas del proceso.
En la antesala de la celebración de la Asamblea General de la ONU, Antonio Tajani, canciller italiano, manifestó su preocupación por la crisis política en Venezuela, tema que se agravó tras los comicios del 28 de julio.
En general, el G7 rechazó los resultados compartidos la medianoche del 29 de julio por parte del Consejo Nacional Electoral en el que Nicolás Maduro resultó vencedor, hecho ratificado días después por el Tribunal Supremo de Justicia.
Asimismo, se llamó a la comunidad internacional “a mantener a Venezuela en un lugar destacado de la agenda diplomática”.
El G7 se puso a disposición para facilitar una transición democrática en Venezuela para dar espacio al candidato “que el pueblo ha elegido claramente en las encuestas”.
El G7 está conformado por los representantes de Italia, Alemania, Francia, Reino Unido, EE.UU., Canadá y Japón.
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