Luego de 15 años se quiebra la hegemonía de la izquierda en Uruguay. En las elecciones del domingo 27 de octubre, el partido de Gobierno perdió la mayoría en ambas cámaras parlamentarias y su candidato presidencial deberá enfrentarse a la centroderecha en un balotaje.
Durante el mandato de Nicolás Maduro en Venezuela, Uruguay ha cumplido un rol clave para que el chavismo se mantenga en el poder. Particularmente en materia de seguridad informática, que ha sido provista a Venezuela nada menos que por el hijo del presidente saliente, Tabaré Vázquez, quien tiene como vicepresidente a la esposa de José «Pepe» Mujica, una exterrorista con prontuario guerrillero.
El vínculo entre el chavismo y el Frente Amplio llegó a tal punto que el retrato del padre fundador de Uruguay, el general Artigas, fue remplazado por el de Hugo Chávez, nada menos que el día en que se celebraba la declaración de independencia.
Pero hoy se enfrentan a un candidato y parlamentarios que llaman abiertamente dictador a quien por años fue aliado. Con lo cual el golpe a la izquierda uruguaya también afecta al socialismo regional.
«Yo no quiero una Venezuela ni una Cuba en Uruguay»
Ya que Brasil está gobernada por Jair Bolsonaro, quien emprendió una cruzada contra el socialismo regional, el Foro de Sao Paulo, que desde la caída de la Unión Soviética congregó a la izquierda internacional, no se celebra más en el país. Ahora el México de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es el anfitrión de la reestructuración del socialismo internacionalista con el Grupo de Puebla, y Daniel Martínez, candidato presidencial de Uruguay por el Frente Amplio que más votos obtuvo (39 %), es integrante de dicha agrupación.
Apenas en la última etapa de su candidatura, cuando vio en riesgo su cargo, Martínez llamó dictadura a la situación en Venezuela. Sin embargo, cuando fue presidente de la empresa estatal de hidrocarburos, Ancap, estuvo de gira con Hugo Chávez por Montevideo, en el 2005.
A diferencia de la vecina Argentina, donde la Presidencia se disputó mayormente entre dos grandes frentes que tuvieron apenas 6 % de diferencia entre sí, en Uruguay hubo un voto dividido; con tres opciones fuertes a la derecha.
Entre ellos, el general Manini Ríos, que fue jefe del Comando Conjunto del Ejército, quien declaró: «desde ya decimos que nosotros no estamos dispuestos a tolerar que se nos use como parte de un plan continental que viene por nuestras libertades».
También afirmó que los uruguayos no quieren que los sigan «usando como peones de ajedrez para ejecutar libres confeccionados por los centros de poder».
Aparece el dictador venezolano diciendo muy suelto de cuerpo que se está cumpliendo a rajatabla lo dispuesto por el Foro de San Pablo. ¿Qué está planificando en Uruguay, qué debemos esperar?
Con apenas cinco meses de existencia, su partido, Cabildo Abierto, que encarna los valores fundacionales del fundador de la nación, el general Artigas, logró cerca de 11 % de los votos y representación parlamentaria.
Por lo tanto Ríos pasará de ser candidato presidencial a ocupar el cargo de senador, junto a su esposa, la exparlamentaria departamental, Irene Moreira, quien anunció en campaña: «Yo no quiero una Venezuela ni una Cuba en Uruguay».
El mayor logro parlamentario de Manini Ríos fue desplazar a Constanza Moreira, legisladora oficialista que encabezó el seminario internacional «el legado de Hugo Chávez».
Tanto la tercera como cuarta fuerza política del país anunciaron que respaldarán en el balotaje al candidato de la derecha, Luis Alberto Lacalle Pou (29 % de los votos), que ha sido históricamente conservador, aunque en estas elecciones presentó un discurso más progresista.
Durante el mandato de Nicolás Maduro en Venezuela, Uruguay ha cumplido un rol clave para que el chavismo se mantenga en el poder. Particularmente en materia de seguridad informática, que ha sido provista a Venezuela nada menos que por el hijo del presidente saliente, Tabaré Vázquez, quien tiene como vicepresidente a la esposa de José «Pepe» Mujica, una exterrorista con prontuario guerrillero. El vínculo entre el chavismo y el Frente Amplio llegó a tal punto que el retrato del padre fundador de Uruguay, el general Artigas, fue remplazado por el de Hugo Chávez, nada menos que el día en que se celebraba la declaración de independencia.
ResponderBorrar