Venezuela ha sido un país en contravía en América Latina, Txoin las Herasn

Desde 2004, una universidad de Colombia sigue la situación venezolana con rigor académico, investigando, publicando libros y difundiendo todo ese conocimiento e información. Se trata del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, de Bogotá, casa de estudios creada en 1653 como Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario (UR), lo que la convierte en una de las instituciones de educación superior más antiguas de América Latina. De tradición laica, por las aulas de esta universidad han pasado 32 presidentes colombianos y muchas otras personalidades de la vida pública de ese país. Su directora es Francesca Ramos Pisnataro, una internacionalista de la Universidad Externado de Colombia con maestría en la Grande École de Commerce de París (ESCP) y de la European School of Management (campus Paris y Oxford). Profesora de la UR, también coordina en Colombia la Red de Estudios Colombo-Venezolanos. A continuación la conversación que sostuvo la directora de este observatorio, único en América Latina, con Tal Cual.

Francesca Ramos Pisnataro, directora del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, de Bogotá, considera que no hay país en toda la región que vaya a asumir mayores costos con lo que pase en Venezuela que Colombia

- ¿Qué es el Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario?

- El Observatorio de Venezuela reúne a un grupo de investigadores que básicamente trabaja en dos grandes frentes. Uno, realizar obras colectivas, libros, con el apoyo de colegas colombianos y venezolanos con quienes se trabaja en red para dar seguimiento al acontecer de Venezuela. Y el otro, informar a la opinión pública, tanto nacional como regional, sobre lo que va ocurriendo en Venezuela y la relación con Colombia.

- ¿Por qué un país se hace acreedor de ser seguido por un observatorio académico?

- La Universidad del Rosario de Bogotá ha sido una institución académica pionera, con una larga historia y partícipe de ella. Con el último cambio de siglo, en 1996, creó la Facultad de Ciencia Política, Gobierno y Relaciones Internacionales e inmediatamente surgió una línea de interés e investigación para estudiar a Venezuela que se formalizó en 2004 con la creación del Observatorio. El rector, en aquel momento, era Mario Suárez Melo, quien fue nombrado embajador en Venezuela en 1997 y el decano fundador de esa facultad, Eduardo Barajas Sandoval, quien tenía una visión internacional muy amplia. Ambos le dieron su apoyo al equipo inicial para que comenzaran a investigar al país más importante para Colombia como es Venezuela. Hay que decir algo que hoy en día puede parecer obvio pero en aquel momento no lo era y es que la sociedad colombiana no conocía a su vecino, con la excepción de algunas personalidades del mundo político e intelectual y de las actividades del grupo académico binacional, integrado por la Universidad Central de Venezuela y la Universidad Nacional. Y a una universidad como la del Rosario, que estaba comenzando a formar estudiantes en ciencias políticas y relaciones internacionales, le llamaba muchísimo la atención. El contexto histórico hizo que el tema fuera interesante, pues 1997 colinda con dos momentos cruciales para ambos países. Por un lado Colombia estaba apostándole a un proceso de paz con el presidente Andrés Pastrana que finalmente no va a prosperar y Venezuela acababa de transitar por una década de crisis, que llamamos de débil democracia, con síntomas que ya eran visibles en los campos socio-económico y político, y que desembocó en el triunfo electoral de un outsider como Hugo Chávez, quien poco antes había intentado un golpe de Estado.

- ¿El objetivo es producir conocimiento para la academia o también se buscan aplicaciones prácticas?

- Al formar parte de una universidad, el Observatorio hace trabajo académico apoyado en una red universitaria colombiana y venezolana que ha resultado, por ejemplo, en el libro Hugo Chávez: una década en el poder, donde se quiso hacer una evaluación de la primera década de su gobierno y el más reciente, De Chávez a Maduro: balance y perspectivas, donde se plasman los resultados de las investigaciones de este conjunto de académicos. El observatorio también ha querido que esos resultados lleguen a una opinión pública mayor y es por eso que también hace un trabajo de extensión que consiste en participar en otros espacios a través de artículos de opinión en medios de comunicación; asistir a debates en programas de radio y televisión; la creación de un Mooc (curso online masivo abierto, según sus siglas en inglés) sobre aspectos de la política venezolana para entender qué es lo que está pasando en el país y la oferta de una asignatura a estudiantes interesados. Los análisis que producimos también tienen como propósito darle herramientas a quienes tienen que tomar decisiones.

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