Para el abogado Tomás Arias el mandato constitucional que obliga al Presidente de la República y a sus ministros a presentar a la Asamblea Nacional un informe de su gestión no es un simple formalismo, sino la puerta para que el Parlamento "controle al Gobierno y a la Administración Pública".
El catedrático de Derecho Público de la Universidad Central de Venezuela aspira que la comparecencia del primer mandatario no sea como hasta ahora "un saludo a la bandera", sino que con ella "se inicien investigaciones e interpelaciones, cosa a la que ya no estamos acostumbrados los venezolanos".
Tras apuntar que los informes de gestión permiten a los legisladores verificar si los ministerios, las empresas públicas y demás organismos emplearon los fondos que les aprobaron en el presupuesto para lo que dijeron que los utilizarían, Arias recordó que "durante el tiempo que el chavismo dominó la Asamblea ella no controló a nadie, no interpeló a ningún ministro y sólo llamó a gobernadores o alcaldes oficialistas que se habían deslindando. Incluso a los diputados opositores les costaba acceder a los informes para analizarlos y plantear temas o críticas en las comisiones o en la plenaria".
"El Ejecutivo debe rendir cuentas a la Asamblea, donde todo el país se encuentra representando y si las explicaciones que ofrece no son suficientes puede haber consecuencias", afirmó Arias en clara alusión a las potestades que tiene el Parlamento para censurar al Vicepresidente y a ministros (numeral 7 del artículo 187 constitucional). JFA
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