ÉTICA, OFIDIOS Y CAPITALISMO / EMETERIO GÓMEZ gomezemeterio@gmail.com

El empresariado venezolano hace esfuerzos por incorporar la Ética en sus enfoques y planteamientos. Bienvenidos esos esfuerzos porque la situación que vivimos clama por una sólida plataforma moral capaz de sostener al país. Porque, además, nos queda muy poco tiempo para tener que volvernos a encargar de él, ante el seguro fracaso de Nikolai Madurosky y Cía. Se habrán cumplido entonces, 15 o 16 años de chavismo y de amagos ñangaras (Porque Chávez fue comunista y Maduro también, señores. Abandonemos, por favor, la exquisitez insostenible de andar llamándolos fascistas. Ni Hitler, ni Mussolini, ni Franco, se plantearon jamás destruir la propiedad privada. Por favor, entendamos esto y dejemos la dulzura de andarlos llamando fascistas. Ellos son claramente co-mu-nis-tas).

Pero, ojalá que estos esfuerzos de nuestro empresariado estén bien dirigidos. Lo digo con resentimiento, porque he hecho todo lo posible por contribuir con dicha causa y nadie me para en lo más mínimo. Ojalá que en este nuevo esfuerzo no anden creyendo que desarrollar una ética consiste en asumir valores y en aprender a identificarse con los obreros; ni siquiera en amar cristianamente al prójimo. Ojalá ya sepan que la batalla moral crucial tiene básicamente que ver por exagerado que suene con el componente animal y, más aún, bestial, del Ser Humano. Que alude a nuestra cercanía ancestral con los monos, primates y gorilas de todo tipo. Que tiene que ver con los cientos de miles de años que convivimos con ellos. Para no hablar de nuestros antecedentes más profundos y más oscuros, más radicalmente animales, de reptiles, ofidios y alacranes. Porque, sin la menor duda, ese componente reptil u ofídico está presente en nosotros. ¡¡Y aflora, precisamente, cuando de la ética se trata!! Con todo lo cual como antecedente, se hace un poco más fácil el aterrizaje en el mundo de la Economía y el Capitalismo. Porque cuando pensamos en nuestro componente reptil ¡y no tanto en la ensoñación que nos dice que somos seres espirituales, elevados y éticos! cuando pensamos en ese reptilito que llevamos dentro, es fácil entender que la Humanidad (esta mismita Humanidad, alta- mente espiritual, que parió a Teresa de Calcuta, Jesucristo, el Buda, Lao Tse, etc.) esa mismita, haya generado dos horrendas guerras mundiales en poquito más de 30 años (1915-1945). Cuando se piensa en nuestro componente reptil y no sólo en la Moral, se está en una mucho mejor posición para captar esa frase demoledora que tanto se discutió en los inicios del Capitalismo: Homo homini lupus, El hombre lobo del hombre. Ojalá que el empresariado venezolano se plantee de verdad el problema de la Ética, ojalá que al hacerlo no se ubique en la tranquila superficie (la de La vida es bella) en la cual todo se reduce a "tener y desarrollar valores"; ojalá lo haga mas bien desde estas profundidades reptiles y aterradoras, en las cuales, ¡¡la Moral se torna casi imposible!!

Tal Cual