Republica del Zulia

Julio Portillo: Necesitamos entonces promover el regionalismo como protesta al excesivo centralismo en todos los órdenes. Tenemos que despertar la conciencia política de la provincia.

lunes, 23 de julio de 2012

El chip / Vitaliano Giannangeli / Presidente de la Ucez


El contrabando de extracción que inicialmente ocurría en poblados cercanos a la frontera ya llega a poblaciones a más de 200 kilómetros

El problema de la gasolina en los estados fronterizos es notorio. El contrabando de extracción que inicialmente ocurría en poblados cercanos a la frontera ya llega a poblaciones a más de 200 kilómetros, al tiempo que aparece una infraestructura  para el almacenamiento y distribución del combustible sin supervisión y de alta peligrosidad. Este contrabando se origina en el sencillo hecho del precio del combustible en Venezuela.Un tanque de gasolina que en nuestro territorio vale Bs. cinco, en la frontera tiene un valor cercano a los Bs. 600. Esa diferencia de precios logra generar ganancias y comprar conciencias. En teoría, no debería pasar por la frontera mercancía no autorizada y menos en gran cantidad. Para que eso ocurra, muchos organismos deben hacerse la vista gorda y permitirlo. Los propietarios de las estaciones no logran contener las compras de los bachaqueros, ya que pondrían en peligro su integridad. Ante la complicidad los organismos de seguridad y control, el Gobierno decide poner en funcionamiento el "chip" para limitar el número de veces y la cantidad que un vehículo podría poner combustible.

En otras palabras, reconociendo la incapacidad de contener las actividades fuera de la ley, se busca limitar el consumo a "justos por pecadores", porque resulta más fácil controlar a los inocentes que a los responsables. Un método que está siendo implantado sin importar las condiciones que deben soportar los usuarios, causando largas esperas y angustiosas situaciones de inseguridad, estableciendo además fechas de instalación prácticamente incumplibles, tomando en consideración la capacidad de atención de los centros de instalación.

Un mecanismo que tendrá un éxito relativo porque no ataca la raíz del problema, que se manifestará por otras vías, quizás menos obvias pero igualmente perniciosas. Una consecuencia más de un precio subsidiado y de una percepción económica que cada día atenta más contra la libertad del consumidor. http://www.laverdad.com