El abogado opositor Perkins Rocha, asesor jurídico de la Plataforma Unitaria Democrática y colaborador cercano de Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, cumple un año detenido en El Helicoide bajo cargos de terrorismo, traición a la patria y conspiración. Su esposa, María Costanza Cipriani, denunció que permanece totalmente aislado, sin defensa privada, en delicado estado de salud y convertido en símbolo de la persecución política en Venezuela.
El 27 de agosto de 2024, funcionarios encapuchados del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) detuvieron al abogado Perkins Rocha. La Fiscalía lo acusó de cinco delitos: terrorismo, traición a la patria, conspiración, asociación para delinquir e instigación al odio. Según su esposa, María Costanza Cipriani, ha sido presentado en varias audiencias y pasado a juicio sin poder designar defensa privada y obligado a ser representado por un defensor público.
“Nos enteramos después de las audiencias. Nunca ha podido juramentar a un abogado de confianza y no tenemos acceso al expediente para conocer cuáles son las supuestas pruebas en su contra”, dijo Cipriani en declaraciones para El Nacional.
En septiembre del año pasado, el fiscal general, Tarek William Saab, vinculó a Rocha, junto con los exdiputados Freddy Superlano y Biagio Pilieri —también detenidos—, con la divulgación que hizo la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) de 85,18% de las actas electorales de las presidenciales, documentos que el oficialismo considera son falsos.
Saab dijo entonces que estos opositores están siendo investigados porque avalaron, verificaron, difundieron y divulgaron como real la página web donde están las actas que la PUD recolectó a través de testigos y miembros de mesa en los comicios, y que el bloque señala como prueba del reclamado triunfo de González Urrutia.
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