jueves, 29 de mayo de 2025

RECORDANDO A JUAN VICENTE GONZÁLEZ Por Douglas Zabala



Juan Vicente González nació en Caracas el 28 de mayo de 1810, en tiempos convulsos para Venezuela, apenas días después de la revuelta del 19 de abril. Sin embargo, él mismo señala en su obra “Historia del Poder Civil en Colombia y Venezuela” que nació un año después del grito de independencia, lo que demuestra su estrecha conexión con la historia política del país.

Este célebre escritor, periodista y activista político se destacó por su verbo encendido y por ser uno de los fundadores del Movimiento liberal en el siglo XIX. Su niñez y juventud transcurrieron en medio de la guerra independentista, lo que marcó su pensamiento y compromiso con los avatares de la nueva república. En 1827, cuando Simón Bolívar visitó Caracas por última vez, González, con 17 años, tuvo la oportunidad de conocerlo en los pasillos de la Universidad de Caracas, donde cursaba estudios.

Formado bajo la tutela de destacados sacerdotes como José Alberto Espinosa y José Cecilio Ávila, González obtuvo el grado de Bachiller en 1828 y de Licenciado en Filosofía en 1830. Inicialmente militó en el liberalismo y en 1840 apareció junto a Antonio Leocadio Guzmán y Tomás Lander como uno de los impulsores del periódico El Venezolano, aunque posteriormente se alineó con los conservadores.

Su verdadera trascendencia la alcanzó en el ámbito literario y periodístico, dejando un legado con obras como Mis Exequias a Bolívar (1842), Las Mesenianas (1846), El baile en Caracas (1854), Ecos de las Bóvedas (1862) y la Revista Literaria (1865). Además, fundó periódicos como El Heraldo y el Diario de la tarde, convirtiéndose en pionero del periodismo venezolano en el siglo XIX.

Hoy, en el siglo XXI, el periodismo libre y la independencia editorial continúan siendo pilares fundamentales de la democracia. En Venezuela, donde la libertad de expresión enfrenta constantes amenazas, el legado de Juan Vicente González cobra especial relevancia.

Su pensamiento sigue vigente, recordándonos que informar con independencia y ética no es solo una labor profesional, sino un deber con la historia y con la libertad.

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