Giga desastre electrizante, José Aguilar

Después de engañar al Zulia por más 209 días seguidos con la mayor calamidad electro-energética en casi 130 años de historia eléctrica de Maracaibo, Corpoelec comienzan a culminar luego de incontables incumplimientos algunos de sus hitos que las autoridades eléctricas llaman mega obras, sin embargo, el primero de ellos en concretarse en la subestación, S/E Cuatricentenario, es una bomba de tiempo, que puede derivar en un Giga desastre para todo el Zulia, ya que viola las mejores y hasta las más elementales prácticas de instalación segura en subestaciones de alto voltaje.

La bomba de tiempo, sucede porque se colocaron los autotransformadores traídos desde la S/E Planta Centro fuera de los muros cortafuego, sin la cantidad de fosas receptoras del aceite dieléctrico, pese a que los muros corta fuego estaban construidos desde 1993. Esa normativa básica se violó, junto con el requerimiento de las fosas colectoras.

Por lo tanto, un incendio en cualquiera de los tres autotransformadores, resultaría en la pérdida de los tres autotransformadores recién instalados, con el agravante de que al no tener las fosas adecuadas y la falta de muros el incendio se podría propagar a los tres autotransformadores originales, también se perderían y posiblemente la pérdida total de la S/E Cuatricentenario. Reponerla sería un tema de 26 meses. Y como está hecha la instalación no cumple con los mínimos requerimientos que se prometieron.

También se eliminó la interconexión con Colombia, al igual que un interruptor en la Línea 1 El Tablazo Cuatricentenario (400 kilovotios, kV), provisionalmente convertida a 230 kV. Las consecuencias de esto son: 1) ambos bancos de autotransformadores operan a través de la Línea 2 El Tablazo Cuatricentenario por consiguiente, cualquier falla, pudiera ocasionar un gran rechazo de carga y completo apagón del estado. 2) Se inhabilita la Línea 2 del tramo mencionado y 3) se resta maniobrabilidad, redundancia.

Estos no son mega obras, son Giga desastres, el Zulia necesita soluciones no más problemas. Hay que salir de ellos sin dilación.

¡Pa´ lante que para atrás espanta!

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