En la mal denominada cuarta república operaba el voto castigo en un sistema dominado por dos partidos políticos, AD y Copei. Cuando el pueblo venezolano sintió los fortísimos efectos de la crisis económica y no vio en el sistema bipartidista la posibilidad de solventar su realidad diaria, surgió la necesidad de un cambio, que se expresó en El Caracazo y luego en un movimiento militar -liderado por Chávez- que se alzó contra el orden constitucional. A los años se posicionó como una tercera vía que capitalizó ese descontento. Chávez -ya en libertad- utilizó el sistema democrático para acceder al poder pero con un discurso antisistema y, sobre todo, de ruptura con el poder existente. Logró capitalizar los descontentos de los sectores populares e incluso de vastos sectores de la clase media. Ya en el poder, su giro al socialismo, su cercanía a Fidel, sus acciones expropiatorias y su discurso, le hicieron perder el apoyo de esos sectores medios.
Podemos
Todos los pueblos nos parecemos más de lo que parece. Desde enero de este año ha surgido en España el partido Podemos, como una fuerza política distinta a los dos partidos tradicionales que se han alternado el poder durante la democracia española. Aun cuando el Partido Popular (actualmente gobernante) y el Partido Socialista Obrero Español siguen siendo inmensas estructuras que ocupan los principales escenarios de poder, representan para muchos el pasado al que grandes masas de ciudadanos españoles culpan de la profunda crisis económica que ya llevan algún tiempo viviendo. Pese a que Rajoy se esfuerza por demostrar la efectividad de las medidas económicas que ha tomado para corregir la economía, el proceso de recuperación es lento y la desesperación de muchos no tiene la paciencia para aguardar a que las cosas cambien. Los desalojos masivos, la cantidad inmensa de desempleados, la creciente aparición de casos de corrupción y, sobre todo, la falta de confianza en un futuro mejor, han hecho que surja esta tercera fuerza.
"Convertir la indignación en cambio político" es el principal lema de Podemos. Encabeza esta organización Pablo Iglesias, un joven bien formado académicamente, irreverente y desenfadado en su manera de aproximarse a la gente. Responde de manera directa y contrasta con los líderes tradicionales que lucen más acartonados. Mezcla en su propuesta ideas socialdemócratas con pensamiento de la izquierda radical. Cada aparición suya en entrevistas televisadas rompe récords de audiencia. Seguramente lo ven tanto los indignados como quienes lo adversan. Se está constituyendo en un fenómeno político. No comparto la mayoría de sus planteamientos. Ya los venezolanos pasamos por eso -aún no hemos salido- y las consecuencias han sido nefastas para nuestra economía y sistema de libertades. Puede que sus aspiraciones prosperen o no; eso se verá a futuro. Lo que me interesa destacar es que las crisis económicas generan descontentos y siempre puede surgir una persona y una fuerza política nueva que capitalice ese descontento ante el hambre de un cambio.
Leer mas en: http://go.shr.lc/1wkWqkW
No hay comentarios.:
Publicar un comentario